La Comisión Europea ha abierto un procedimiento de infracción a España por incumplir la Directiva que obliga el pago por las dos últimas semanas del permiso parental. Los Estados miembro debieron transponer a sus legislaciones nacionales esta medida el pasado mes de agosto como fecha límite.
La norma entró en vigor en julio de 2019, pero el Ejecutivo comunitario dio más tiempo para aplicarla. El plazo para transponer la mayor parte de las disposiciones quedó aplazado a agosto de 2022, y para agosto de 2024 la medida que se refiere al pago de las dos últimas semanas.
Este toque de atención con una carta de emplazamiento es el primer paso de un expediente sancionador. Ahora, ha dado un plazo de dos meses al Gobierno para que tome medidas que corrijan esta irregularidad. En caso de incumplimiento, el tema puede llegar hasta el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, que es el competente para dictar las sanciones.
Al menos siete millones de euros de sanción
El pasado mes de agosto, el Ministerio de Trabajo y Economía Social señaló que Bruselas multaría a España con al menos 7 millones de euros por incumplir esta disposición, y que la cifra aumentaría si el incumplimiento persistía.
La Directiva (UE) 2019/1158, relativa a la conciliación de la vida familiar y la vida profesional de los progenitores y los cuidadores, fija en el artículo 8 la remuneración de este permiso: “El Estado miembro o los interlocutores sociales definirán dicha remuneración o prestación económica y lo harán de manera que se facilite el que ambos progenitores puedan disfrutar del permiso parental”.
«Desde CSIF celebramos este varapalo de Bruselas, ya que nos da la razón sobre la denuncia que interpusimos en septiembre de 2023 ante la Comisión Europea de la tardía e inadecuada transposición de la citada Directiva y la falta de voluntad del Gobierno para adoptar medidas de conciliación efectivas conforme a la Directiva europea», declara a Economist & Jurist Eva Fernández Urbón, secretaria Nacional de Igualdad y Responsabilidad Social de CSIF.
Ahora, el sindicato exige al Gobierno que desarrolle esta prestación de manera inmediata.
«La falta de conciliación en nuestro país es uno de los grandes problemas para conseguir la igualdad real entre hombres y mujeres. Debemos seguir avanzando, y para ello necesitamos contar con permisos de conciliación retribuidos; actualmente los datos nos demuestran que, de forma mayoritaria, es la mujer la que asume la pérdida retributiva que conllevan los cuidados», subraya.
Además, señala que «debemos tener en cuenta que la brecha salarial actual en España –situada en un 19,89%, según el informe anual de CSIF de 2024– «es debida, entre otras cuestiones, a la falta de conciliación y corresponsabilidad».
Instrucciones claras que no den lugar a dobles interpretaciones
En su día, CSIF ya reclamó a Función Pública «instrucciones claras» para promover que la conciliación se retribuya a los trabajadores que lo soliciten conforme establece la Directiva europea en la que se inspira esta medida, dado que si no las da, «las organizaciones las interpretan en su beneficio, perjudicando así a los empleados».