Por Susana Alcelay, abc
La subida del salario mínimo en casi un 30% en dos años, primero, y el Covid, después, han hecho estragos entre las empleadas del hogar que cotizan a la Seguridad Social, que hoy están en su nivel más bajo desde 2012. Este año estas trabajadoras pasaron a formar parte del régimen de asalariados del sistema; antes contaban con un régimen propio, similar al de los autónomos.
Para encarar el alza del SMI hasta 950 euros, en 2020 algunas familias, que o bien no pudieron o no quisieron asumir el incremento, optaron, en el mejor de los casos, por modificar el contrato y recortaron la jornada laboral de la empleada para pagar lo mismo. En el peor de los escenarios……..