La galardonada destacó las lecciones aprendidas durante el confinamiento como la ruptura de los roles de género, pero a su vez lamentó la «trágica lección» con el aumento de la violencia contra las mujeres
Premio Princesa de Asturias Comunicación y Humanidades 2021
La periodista, escritora y activista Gloria Steinem, galardonada con el Premio Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades, ha agradecido su reconocimiento a la Familia Real y a la Fundación Princesa, pero también nombró a Socorro Suárez Lafuente, quien propuso su candidatura. «Es la primera vez que recibo un premio en honor a una mujer».
En su mensaje, destacó las circunstancias que acarreó durante más de año y medio la pandemia, en la cual señaló que «ninguna frontera nacional o diferencia cultural puede retener por completo un peligro para la salud que sea verdaderamente global». Asimismo, no dudó en reivindicar la igualdad por la que ha luchado: «No existen los inmigrantes, todos somos pasajeros en esta nave espacial terrestre, con la esperanza de salvar nuestros futuros y nuestros bosques, que son nuestro futuro».
Se refirió en sus palabras también a la labor excepcional que realizaron los sanitarios. Pero, ante todo, hizo hincapié en los valores aprendidos en el último año, de los cuales espera que «pensemos en cómo valorar las lecciones aprendidas».
Incluso, a su juicio, el confinamiento logró concienciar sobre el cambio de los roles de género: «En muchas ocasiones esto liberó a las personas de las ataduras de los roles de género, que en realidad son bastante nuevos en la historia de la humanidad». Por otro lado, la violencia doméstica contra las mujeres, destacó Steinem, «a veces aumentó durante este año de confinamiento y esta fue una trágica lección».
En su escrito, la galardonada destacó los cambios que se hicieron más visibles en su país -Estados Unidos-, así como el racismo que «ha alcanzado un punto de inflexión tanto en lo negativo como en lo positivo». No le faltó tampoco mencionar a Donald Trump, quien ha sido el que «más ha dividido el país en la historia de Estados Unidos» con una revolución que llevaba por nombre ‘Black Lives Matter’.
Steinem concluyó resaltando el valor de la risa como arma de libertad. «La risa es la única emoción libre, la única que no se puede imponer y es una prueba de libertad».